Lúcifer, la Estrella de la Mañana, hijo del amanecer y portador de luz. El más brillante entre los hijos de Dios, el más célebre de los arcángeles. Sus virtudes eran inmensas, pero tan grandes como ellas, su orgullo. Y debido a él, Lúcifer se levantó en rebelión contra el trono divino y un tercio de las huestes celestiales se unió a él hasta que Miguel puso fin a la insurgencia.
Su caída al vacío, que pasaría a llamarse Sheol, el Infierno, fue profunda. Allí fue condenado a velar sobre las almas de los condenados hasta el ajuste de cuentas en el Apocalipsis. Desde entonces, se le ha conocido por muchos nombres: Arcángel sombrío, ángel caído, diablo, demonio, satanás, el Enemigo. Desde tiempos primordiales, ha sido representado de diferentes formas en el cristianismo.
Es el adversario, la encarnación de todo lo malo, el origen del pecado, el corruptor del Edén. Pero también es una figura trágica en busca de un paraíso perdido por sus propios errores, una historia de advertencia. Sea cual sea la verdad, su sombra es larga y suspiros sobre su ser siguen atormentando a la humanidad hasta hoy, incluso en la era de la ciencia y el escepticismo.
Material: Resina de alta definición
Peso: 300 g
Altura: 24 cm
Longitud: 15 cm
Ancho: 12 cm
*Imágenes solo ilustrativas.
**Producto frágil.
***Pintura semi manual, lo que resulta en diferencias individuales en cada producto.
***Dependiendo del modelo, el producto puede enviarse en partes separadas, con conectores y pegamento, para que el cliente lo arme.