Enki es una figura importante en la mitología sumeria, conocido como el dios de la tierra y las cosechas. A menudo se le representa como un guardián benevolente de los cultivos y campos agrícolas, encargado de garantizar una cosecha abundante para el pueblo sumerio. Enki también es venerado como protector de las ciudades y comunidades, invocado en rituales y ceremonias para asegurar la seguridad y prosperidad de sus devotos.
En la mitología sumeria, Enki está frecuentemente asociado con la deidad femenina Ninhursag, que se considera su esposa y compañera. Juntos, Enki y Ninhursag forman una poderosa pareja divina que representa la fertilidad y la renovación de la naturaleza. Sus leyendas y mitos celebran la armonía entre el hombre y la tierra, destacando la importancia de la agricultura y el cultivo para la supervivencia y el bienestar de la sociedad sumeria.
Aunque Enki es venerado como una deidad benevolente y protectora, también se le teme como un juez implacable que castiga a quienes desobedecen las leyes y principios del orden natural. Su figura imponente y su poder divino inspiran respeto y devoción entre los sumerios, quienes buscan su bendición y protección en sus actividades diarias y en sus viajes espirituales. Enki sigue siendo una figura central en la mitología sumeria, influyendo en las creencias religiosas y prácticas de la antigüedad hasta el día de hoy.
Material: Resina de alta definición
Peso: 250 g
Altura: 23,2 cm
Longitud: 12 cm
Ancho: 8,3 cm
Imágenes solo para fines ilustrativos.
Producto frágil.
Pintura semi-manual, lo que puede resultar en diferencias individuales en cada producto.
Dependiendo del modelo, el producto puede enviarse en partes separadas, con encaje y pegamento, para que el cliente lo ensamble.
