Morrigan, la diosa celta, es una figura poderosa asociada con la guerra, la muerte y el renacimiento. A menudo se la representa como una guerrera y también es una metamórfica, capaz de adoptar la forma de un cuervo, una serpiente o una loba.
Morrigan es una diosa compleja y misteriosa, a menudo retratada como un ser oscuro y temible. Aunque frecuentemente se asocia con la muerte, también simboliza la renovación y la regeneración. De hecho, se la considera una guardiana de las tierras y las aguas, y se le respeta por su capacidad para proteger y nutrir la naturaleza.
Si estás buscando una pieza única para tu colección de arte o para decorar tu hogar, una estatua de Morrigan puede ser una opción interesante. Es un recordatorio poderoso de que la vida está llena de desafíos, pero que también podemos encontrar fuerza y renovación en los momentos difíciles.
Peso: 280 g
Altura: 20 cm
Longitud: 13,5 cm
Ancho: 12 cm
*Las imágenes son solo ilustrativas.
**Producto frágil.
**Pintura semi manual, lo que da como resultado diferencias individuales en cada producto.