Michelangelo Buonarroti, uno de los mayores genios del Renacimiento, dejó un legado inigualable en el arte y la arquitectura. Nació en 1475 en la pequeña ciudad de Caprese, Italia, y se destacó desde joven por su talento extraordinario. A través de sus esculturas, pinturas y obras arquitectónicas, Michelangelo capturó la esencia de la belleza humana y la majestad divina, convirtiéndose en una figura central de la historia del arte.
Su pasión por la perfección era evidente en cada obra que creó. Uno de los episodios más fascinantes de su vida fue la realización de la estatua de David, una obra maestra esculpida en mármol que se convirtió en un símbolo del ideal renacentista de fuerza y belleza. Se dice que Michelangelo pasó días y noches trabajando incansablemente para extraer la forma perfecta de ese bloque de mármol, como si estuviera liberando un alma atrapada en la piedra. Esta dedicación obsesiva es un testimonio de su compromiso con el arte.
Además de sus esculturas, Michelangelo también es conocido por sus increíbles pinturas en el techo de la Capilla Sixtina en el Vaticano. En medio de innumerables dificultades y desafíos, creó una de las mayores obras artísticas de la historia, cubriendo el techo con escenas bíblicas de impresionante belleza. Su habilidad para capturar la emoción y la narrativa a través de sus pinceladas detalladas sigue inspirando y asombrando a los espectadores hasta hoy. Michelangelo no solo redefinió lo que era posible en el arte, sino que también dejó un ejemplo duradero de cómo la pasión y el talento pueden transformar el mundo.
Material: Resina de alta definición
Peso: 360 g
Altura: 19 cm
Longitud: 8 cm
Ancho: 13 cm
*Las imágenes son solo ilustrativas.
**Producto frágil.
***Pintura semi manual, lo que resulta en diferencias individuales en cada producto.
***Dependiendo del modelo, el producto puede enviarse en partes separadas, con ensamblaje y pegamento para que el cliente lo aplique.
