Isaac Newton es una de esas figuras que moldearon el mundo tal como lo conocemos hoy. Desde joven, Newton mostró una curiosidad insaciable. Criado por su abuela después de la muerte de su padre y el segundo matrimonio de su madre, era un joven introspectivo y más interesado en los libros que en las actividades físicas. Esta inclinación por la lectura y el estudio lo llevó a desarrollar una pasión por las matemáticas, la física y la filosofía natural.
Una de las historias más famosas relacionadas con Newton es el "incidente de la manzana". La leyenda dice que, al observar una manzana caer de un árbol, comenzó a reflexionar sobre la gravedad. La caída de esa fruta lo llevó a pensar en la fuerza que mantiene a los planetas en órbita alrededor del Sol. Aunque la veracidad de esta anécdota es cuestionable, indudablemente ilustra el espíritu curioso de Newton, quien siempre buscaba explicaciones para los misterios del universo.
Además de sus contribuciones revolucionarias a la física, Newton también tenía intereses algo peculiares. Se dedicaba al estudio de temas místicos y alquímicos, creyendo que había secretos ocultos en la naturaleza y en las escrituras antiguas. Estos intereses muestran un lado más humano y misterioso de un genio que no se conformaba solo con lo que podía ser medido u observado, sino que también buscaba desentrañar los misterios de lo invisible. Isaac Newton falleció en 1727, pero sus ideas y descubrimientos siguen influyendo en la ciencia y el pensamiento moderno.
Material: Resina de alta definición
Peso: 200 g
Altura: 19.2 cm
Longitud: 8.3 cm
Ancho: 12.7 cm
Imágenes solo con fines ilustrativos.
Producto frágil.
La pintura semi manual puede resultar en variaciones individuales de color y peso en cada producto.
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