Descrita como la creación más original del panteón romano, Venus es la diosa del deseo, la fertilidad, el amor y la belleza. Representando la unión entre hombre y mujer para la creación de vida, Venus fue ampliamente venerada, especialmente por mujeres embarazadas que le ofrecían tributos en busca de protección y bendiciones.
Nacida del mar, Venus es la contraparte de Vulcano y Marte, los dioses del fuego y la guerra. Su influencia trascendió el mundo antiguo, dejando una profunda huella en el arte clásico y renacentista. Templos y estatuas dedicados a ella se han encontrado por todo el antiguo Imperio Romano. Durante el Renacimiento, Venus se convirtió en un icono erótico y puro al mismo tiempo, simbolizando la dualidad de la belleza y el amor.
Inspirada en la icónica obra "El Nacimiento de Venus" de Sandro Botticelli, nuestra estatua retrata a la diosa emergiendo del mar, elegantemente elevada por una concha, capturando la gracia y delicadeza de esta obra maestra artística.
Especificaciones:
Notas: